miércoles, junio 29, 2011

el alma de una roca

Lo saque de su hermoseada cajetilla, un cigarro tipo habano, aromático, una delicia. Estos son los breves momentos donde agradezco mi estupidez por seguir viva. Bueno, no me quedaré hablando sobre ser amante del tabaco y quizá ahora no tengo una historia digna de ser contada, entonces divagaré en mis intentos de historia y ese resultado de cuentos morales que a veces emanan sin control porque la realidad devoró hasta la ultima fibra de imaginación de una infancia insatisfecha.
Anoche soñe algo extraño, veia a mi familia y golpeaba a todos, a los mas jovenes y los mas viejos sin piedad, mi puño estaba humedecido de esa rojiza sangre ajena, rompía todas las reliquias de la familia, y despues huía trepandome en todas partes, hasta que subí al parrón mientras que un perro me perseguía y yo con miedo, pensaba que este pretendia morderme hasta que su ocico se acerco deliberadamente hasta mi vagina y lamió un poco de sangre que se salia del calzon. Muy extraño, fui dueña de una increible fuerza animal y este mamifero que detesto se acercó casi de forma sexual para darme aliento. No lo sé, a veces me siento tan lejana de mi genero, antes escribia cosas hermosas, no me refiero a que sean dueñas de talento, sino, eran colores, materiales, lugares, todos partes de una utopia femenina, pero ahora, me siento cada vez un hombre burdo, de cierto modo, una mujer cualquiera... que es lo que quiero ser, pues deseo ser un hombre inteligente, el ultimo estadio de un hombre misogino y lo ultimo que jamás podría ser. Me siento como el salvaje que jamás vio otro humano y no sabe a quien asemejarse, asi que se acerca al mamifero mas cercano, lo imita, pero sabe muy bien que no son lo mismo asi que la angustia se adueña de su ser. Yo me siento así, esa mujer que ve a su entorno y no ve a nadie mas de su especie, asi que ve algo de ella en los hombres y trata de asimilar su imagen, aparenta ser... pero ve en su intimidad ese inutil órgano un poco morado, ese surco infertil dominado por las ideas. Y aprecio el sexo con otro hombre ya que hay admiración por su cuerpo, deseos... y trato de cumplir los instintos mas animales en esa situación, como lo pensaría un hombre, como podría pensarlo en mi identidad, una mujer que no esta lejos de una belleza femenina, pero la mujer solo es bella porque es cercana a una imagen infantil y esa belleza se va con las arrugas, y no se acerca a un hombre... solo, se aleja de la belleza intrínseca de la cual se adueña. Y la mujer fea es igual que un hombre bello... el hombre con cara angelical tiene el mismo poder que una mujer, puede tener poder de la misma forma, a través del sexo, de un veleidoso comportamiento... quiza solo soy un chiquillo escondido en una piel femenina, pero así son las cosas, ideas en un cuerpo... una simple alma en una roca.
Y quiza el sueño tiene algo que ver, el perro sintió lastima de mi naturaleza que sufre mes a mes cuando ve la sangre en su ropa interior, quiza soy mas feliz cuando alguien lame la sangre, la peor herida de ser mujer...

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