El primero siempre es importante, el primero en la cama y después el primero en dormir en el corazón. Ya olvidando las anécdotas divertidas: Los raros lindos, los inteligentes, los discursos sexuales y los gemelos Espejos, viene la parte máxima de mi estupidez.
Muchas veces hay experiencias sobre la primera vez de una mujer que es frustrante, dolorosa, complicada, demasiado nueva o chocante. La mía fue linda, un 8 de agosto del 2009, un día de lluvia y pasteles. Me trató con tanto cariño y valoró tanto mi regalo, que después terminé con mi refrigerador lleno de cosas para comer, con cadenas de corazones. Esa relación se marchitó... no fue estupidez, no fue falta de amor, tan sólo no pudo ser ni seguir.
Y ahora viene él, también la lluvia, las blasfemia fuera de la iglesia, el pikachu hecho de un guante plástico, la ropa oscura, el color de pelo fucsia, las vacaciones de veranos con y sin el, el trapo en mi estomago para calmar el dolor, los almuerzos, los abrazos oportunos, las crisis emocionales: Tirarme en medio de la calle para ser atropellada, el berrinche en mi habitación que conllevo a una sobredosis de medicamentos, los seis portazos de tu puerta mala. Su infidelidad con la guitarra eléctrica, las discusiones sobre la ropa, y sin la ropa, la banda de jazz, los completos a las 3 de la mañana fuera de la facultad de ingeniería, el papel en el vidrio que decía la peor frase "dejemonos de rodeo, revisa facebook", el otro papel en el vidrio que decía "hola", nuestras infinitas caminatas nocturnas y las conversaciones interminables. esta vez estuve loca, pero tenía algo valioso, lo tenía a el, lo amaba tanto, lo deseaba tanto... y ahora le pregunto a la flor marchita :¿Qué nos pasó? y ella me respondió: Paso la vida, pasas que cosan.
Tantos amantes a mi corta edad, pero tuve un amor que me dio la vida, que parió la alegría después de los meses bajo la frasada oscura. Te amo, nunca te olvidaré.
1 comentario:
le amas?
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