Por escuchar música empecé a acordarme de algunas cosas, entre esas la primera pijamada que tuve, donde celebrábamos el cumpleaños de mi hermana. En la noche vimos matrix, mientras nos reímos de cosas de niños. Recordé que invité a una amiga del colegio en esa ocasión, la Paulina, ella repitió al menos 5 veces que su papá coleccionaba llaveros, luego de esa frase se transformó en una broma interna. Me acordé de cómo nos volvimos amigas ese año y fue porque unas compañeras que se sentaban con ella le quitaron el asiento, lo que generó que se cayera y se golpeara muy fuerte su cabeza. Faltó muchos días al colegio, pero por cortesía le pregunté a su madre cómo estaba la salud de Paulina, ya que la vi en el colegio. No sé por qué, pero cuando volvió a clases ella estaba muy agradecida, así que me buscaba para conversar. Después de eso nos volvimos muy cercanas, solía ir a su casa seguido y a veces sin avisar.
Yo era una niña muy tímida, por lo que me intimidaba el desplante que ella tenía, pero me facilitaba las cosas. Sin embargo, una vez ella se molestó conmigo y se paró de mi lado, yo no supe qué hacer así que sólo le sostuve el delantal para que no se fuera. Fue la primera vez que me angustió la indiferencia de alguien, o el quiebre de una relación que intentase formar. Sentí tanta vergüenza de tratar de no dejarla ir, así que desde ese momento me encerré en mi misma por largo tiempo. Definitivamente nunca he sido una persona muy efusiva con las palabras, pero ahora me encuentro aquí hablando sobre un recuerdo...
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