Tenía hambre, ya ni siquiera podía lamer entre sus dientes y sentir lo ultimo que habia comido. ¿Cómo es posible no ver algunas cosas, ni siquiera saber de la existencia de ello?
Furtiva, bajo de la ventana del acusado, de aquel hombre que causo todo este desastre, me dispuse a oir las palabras que emergian de su boca.
Toma el telefono; habla por el; enojado; molesto; abrumado; cuelga; se sienta en el sillon; "¿por qué? ¿a que se debio esa serie de errores?; el telefono suena; el sigue reposando, no se levanta; soy yo al telefono; mi celular esta en mis manos... cuelgo.
Esa boca, esa forma que se hace entre los labios, como una gaviota a lo lejos en el aire salado de las costas. Sus ojos grandes, expresivos de silencio; Su barbilla que le da un aire de melancolia a su rostro... Como alguien asi puede existir. En realidad no existe.
Tapada hasta la coronilla de las sabanas domingueras, sus ojos estaban apretados, que casi las pestañas se sumergian dentro del sueño...
Tendida en la tierra, ensimismada ante el dolor lancinante de su estomago, sus ojos desprendian lagrimas de sueño eterno y sus labios recordaban unos ajenos.
Un beso se cuela entre las sabanas y la hace despertar, sus manos lo asen con alegria y la bienvenida al nuevo día, el cual parece ser una mañana blanca, hace que la plenitud sea lo que se siente en ese momento. Que dicha.
El no me ve, yo tampoco quiero que me vea... ya es tarde y él se dispone a tomar once, tanto lo conozco, tanto se del que puedo vaticinar cada uno de sus actos, incluso con que mano recogerá el primer trozo de pan.
Era hermoso, pero sostenía un rifle en sus manos y ese signo nazi en su hombro... yo... parezco ser judía y consumidora de una bala. Como algo tan hermoso, un hombre como cualquiera, humano más equivocado y certero, tan predecible como muchos de los personajes que viven dentro de este mundo. Tras su frente hay pensamientos que me odian, tras la mía... solo piensa en amarlo. ¿ese es mi grado de filantropía?
¿Acaso no ve que puedo amar o que existe en mí algo que va dirigido hacia el?
algo que parece ser inexistente, en fantasias logra ser casi palpable.
1 comentario:
me gustan los detalles particulares de la historia, pero, aparte de la amargura obvia que describes, siento otra debajo, mas profunda... no se, quizas es solo el hambre tipico de estas horas que condiciona mi juicio y no tengo ganas de hacer nada para comer...
los sentimientos son el peor enemigo del pensamiento racional...
...aveces no se para que pienso.
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