El arrepentimiento no es una cosa que se les da a todos por igual, a veces no sólo se necesita equivocarse, sino sentirse hundido en la misera de la estupidez. Pero quizá aun así existan esas personas que apelan que da igual cuan torpe te comportaste, o que tan garrafal sea el error, que "es parte de la vida" y esas -mierdas- cosas sin mayor trascendencia o profundidad, que suelen decir las personas cuando tienen esos atisbo de sabiduría. Para mi es sencillo, no necesito ser sabia para entender que el arrepentimiento sólo es parte del aprendizaje: depende de cada uno si desea volver a hacerlo, porque claramente no podrás retroceder.
Pero como decía Edith Piaf, "no me arrepiento de nada, ni del bien ni del mal", yo me arrepiento mucho y he aprendido bastante para volver a equivocarme en lo mismo, ahora estaría en cuestión si prefiero equivocarme en cosas nuevas y así quitarle la rutina al mismo error. ¿No les parece?
No hay comentarios.:
Publicar un comentario