Como si algo de felino tuviesemos, que miramos desde la altura para dimensionar el tránsito y el rumbo, desde un balcón tenemos una puesta en escena de todo lo que ocurre, para encontrar en ese todo lo que pueda ser un paso microscópico. A veces no sólo es la altura, a veces es la distancia, es la contraposición y el contraste, como el rebelde situándose al final de la sala. Pero el juego no es sólo situarse desde el panóptico, sino decidir ir a cada lugar para poder saberlo todo, porque se quiere todo. Una ilusión y a la vez un aliento, una elección de dónde jugar.
sábado, marzo 20, 2021
Conocimiento desde el panóptico
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario