Mientras que la ventana iba llegando a su destino pensaba que estaba equivocada con algo que creía hace mucho tiempo... No, no soy una soñadora y nunca lo había sido. Todo comenzó por una endeble idea sobre ese complejo que llaman "amor"... No, no soy una soñadora y nunca lo había sido. Te saqué de mi cajón para ponerte nuevamente en la mesa... No, no soy una soñadora y nunca lo había sido. Y ahí surgió de nuevo...
Nunca se deja de amar, tan sólo se guarda, vives otras cosas y personas. Porque amor para mí siempre ha significado conocimiento, mientras más te veo, mientras más te conozco, mientras más alientas mis impulsos... una persona como tu alienta mis impulsos a la realidad. No, no soy una soñadora y nunca lo había sido. Y cuando hay realidad, cuando hay aceptación, hay vida. No, no soy una soñadora y nunca lo había sido. Y cuando hay vida... anhelo la realidad...pero como dije, el amor se guarda cuando no estás, y espera de la realidad que sea una vez más tu mirada frente la mía. Pero no es algo de cajones cerrados... no hay llaves... no hay secretos... No, no soy una soñadora y nunca lo había sido.
No sé que decir... ahora soñando te extraño, ahora viviendo quema... y ahora que deseo decirtelo quiero que un poco de este fuego se agite en el aire, emane una chispa que como un beso toque tu pensamiento.